Todo preparado:
La conciencia tranquila
la infusión de melisa en la mesita
la almohada con sus gotas de labanda
la cama tibia
el sexo caldeado
y los pies, más o menos...
El dinosaurio que se cuelga en la pared
trata de decirme hasta mañana
me saca la lengua.
La chica del espejo
me hace la misma mueca cada noche
se ríe de mí.
Te espero mientras escribo
versos en el aire
estrofas que destrozo
que deposito en la frágil memoria
de la madrugada.
Aprieto los ojos
respiro sosegada.
Cuento todos los rebaños de la provincia.
Te espero...
Los sonidos que el terrazo consiente
hormigas con pasos de gigante, me asustan.
Tengo frío en el corazón
y sé que hoy
tampoco explorarás mi abismo
tampoco repondrás los nombres
los títulos, las caras...
Mañana, madrugo como ayer
con el mismo dolor occipital
con la misma mirada, derretida.
1 comentario:
Como siempre un placer participar en este espacio, gracias.
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